Feliciano Hernandez
Miembro de la Vieja Guardia
En lo que va de este sexenio que no lleva ni un año se han aprobado:
Ley de Telecomunicaciones: obliga a empresas a conservar metadatos de comunicaciones y permite geolocalización en tiempo real.
Ley de Población: con la creación de una Cédula Única de Identidad Digital centralizada, (CURP Digital). Se usará para rastreo y control poblacional. No podrás comprar o vender sin ella. No podrá ser falsificada pues tiene tus biométricos de huellas digitales y retina.
Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública: da acceso a datos biométricos y registros personales a las fuerzas de seguridad y sin necesidad de orden judicial.
Ley de la Guardia Nacional: permite la militarización de tareas de seguridad pública, debilitando el control civil.
Reforma a la Ley de Armas de Fuego y Explosivos: endurece penas y requisitos, incluso para personas que posean armas de manera legal, lo cual puede usarse para criminalizar opositores y limitar aún más los derechos a la autodefensa.
Sean bienvenidos al nuevo Estado Mexicano. Totalitario, policiaco, y con un control sobre la población que ni el mismísimo Stalin soñó.
¡Estamos comenzando una nueva etapa que será horrible!
Un régimen totalitario, pero no necesariamente con un solo rostro, sino con un continuo de poder que se renueva, mimetizándose bajo diferentes formas, ya sea AMLO, Sheinbaum, o el hijo de AMLO, o quien sea el sucesor.
Esa transición de poder será sin cambios sustanciales en la estructura política de fondo: las élites, el narco, el gobierno, todos unidos por intereses comunes de control, explotación y represión.
La tecnología jugará un papel decisivo en este presente y futuro distópico:
Control y vigilancia digital masiva: La centralización de información a través de bases de datos, seguimiento de transacciones y huella digital y de retina será parte del control social.
Reformas que parecen combatir al crimen, pero en realidad consolidan el poder de los opresores.
La criminalización de la disidencia será más visible y sobre todo legal, con una arquitectura jurídica "a modo", que "justifica" el control social como parte de la seguridad pública.
Murió la República y se acabó la incipiente Libertad, que nunca terminó de consolidarse realmente.
“En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario.” George Orwell.
Suerte.
(Mi amigo Arnulfo Borgia a quien banearon injustamente aquí, siempre tuvo razón).
Ley de Telecomunicaciones: obliga a empresas a conservar metadatos de comunicaciones y permite geolocalización en tiempo real.
Ley de Población: con la creación de una Cédula Única de Identidad Digital centralizada, (CURP Digital). Se usará para rastreo y control poblacional. No podrás comprar o vender sin ella. No podrá ser falsificada pues tiene tus biométricos de huellas digitales y retina.
Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública: da acceso a datos biométricos y registros personales a las fuerzas de seguridad y sin necesidad de orden judicial.
Ley de la Guardia Nacional: permite la militarización de tareas de seguridad pública, debilitando el control civil.
Reforma a la Ley de Armas de Fuego y Explosivos: endurece penas y requisitos, incluso para personas que posean armas de manera legal, lo cual puede usarse para criminalizar opositores y limitar aún más los derechos a la autodefensa.
Sean bienvenidos al nuevo Estado Mexicano. Totalitario, policiaco, y con un control sobre la población que ni el mismísimo Stalin soñó.
¡Estamos comenzando una nueva etapa que será horrible!
Un régimen totalitario, pero no necesariamente con un solo rostro, sino con un continuo de poder que se renueva, mimetizándose bajo diferentes formas, ya sea AMLO, Sheinbaum, o el hijo de AMLO, o quien sea el sucesor.
Esa transición de poder será sin cambios sustanciales en la estructura política de fondo: las élites, el narco, el gobierno, todos unidos por intereses comunes de control, explotación y represión.
La tecnología jugará un papel decisivo en este presente y futuro distópico:
Control y vigilancia digital masiva: La centralización de información a través de bases de datos, seguimiento de transacciones y huella digital y de retina será parte del control social.
Reformas que parecen combatir al crimen, pero en realidad consolidan el poder de los opresores.
La criminalización de la disidencia será más visible y sobre todo legal, con una arquitectura jurídica "a modo", que "justifica" el control social como parte de la seguridad pública.
Murió la República y se acabó la incipiente Libertad, que nunca terminó de consolidarse realmente.
“En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario.” George Orwell.
Suerte.
(Mi amigo Arnulfo Borgia a quien banearon injustamente aquí, siempre tuvo razón).
Última edición: