Hay una crisis de seguridad en el país, es innegable, el descontrol vino de la semi-institucionalización de grupos delincuenciales desde inicios de los 80, aunado a la falta de una política de seguridad, transparencia, alternancia y nuestra cultura de la simulación y el clientelismo político que en conjunto crearon la tormenta perfecta... el poder que tiene la casta política en este país es desproporcional a sus funciones, sin embargo, ante un país ignorante de su propia historia y de acontecimientos fuera de su realidad percibida, emergen rampantes teorías conspirativas que crean "discursos y teorías únicas" para explicar una realidad muy compleja, demasiado compleja, que involucra a una multitud de participantes desde una multitud de escenarios, desvinculados, desorganizados, persiguiendo cada uno sus propios intereses... ¿cómo puede este personaje hablar de un plan internacional para adueñarse de un país a través de la desestabilización? cuando la narco-violencia nos ha traído desconfianza, baja en el consumo, más violencia y el desprestigio internacional, ¿De qué pinche plan habla este señor? cuando los diputados de un mismo partido no pueden ponerse de acuerdo con su propio presidente, cuando hay tantas visiones y tantos intereses como actores en el escenario...
Me parece que su información es muy ambigua, sus fuentes poco confiables, yo detesto al gobierno, los partidos, la partidocracia, mis representantes, el IMSS, al SAT y. prácticamente todas nuestras instituciones, las descalifico como el lavadero de mierda que son, nuestro presidente es un perfecto idiota, inculto, volátil, petulante y, quizá, hasta puñal, han desbaratado el país en los últimos tres años de una forma increíble, aún así, dudo mucho que haya un plan maestro, ojalá no me equivoque, ojalá sean estos los efectos de un par de gobiernos irresponsables, corruptos y muy pendejos, ojalá sea esto lo que nos hace falta para sacudirnos el mal gobierno y empezar a exigir como comunidad, como sociedad civil exigir gobiernos, gobernantes y leyes responsables, ojalá...
