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La Guerra de Los Cristeros

Acerca de los cristeros les recomiendo un libro de Salvador Borrego , retoma las notas y la experiencia de Leon Degrelle en su visita a los cristeros en Mexico.
 
En ese movimiento cristero surgieron muchos santos mexicanos (así los considera la Iglesia Católica) me pregunto si entre ellos estará el padre Pro, de ser así, podríamos considerarlo como el santo patrono de los terroristas.
 
CRONOPIO TELL:

EL PADRE PRO FUE UN JESUITA CONNOTADO , EN QUE FUNDAS TU DICHO DE LLAMARLO SANTO DE LOS TERRORISTAS?

CONOCES ALGO SOBRE SU VIDA Y OBRA? CLARO QUE NO SEA LA CONTADA POR ELIAS CALLES.

COMO SEGURAMENTE LA RESPUESTA ES NO....... TE DEJO UNA BREVE SEMBLANZA Y QUE CONSTE EN ACTAS QUE NO ES TENDENCIOSA O ESCRITA POR ENTE CATOLICA ALGUNA.

Miguel Agustín Pro Juárez (nacido en Guadalupe (Zacatecas), 13 de enero 1891 - muerto en Ciudad de México, 23 de noviembre de 1927) fue presbítero católico, miembro de la Compañía de Jesús, acusado de participar en actos de sabotaje y terrorismo, en el contexto del conflicto Iglesia-Estado que afectó a México entre 1926 y 1929 (la denominada "Guerra Cristera"). Murió, sin juicio alguno ni desahogo de pruebas, junto con su hermano Humberto Pro Juárez, fusilado por un pelotón en una comandancia de la policía de la ciudad de México, ubicada entonces en lo que es ahora el Edificio El Moro de la Lotería Nacional. Fue beatificado por el Papa Juan Pablo II en 1988, entre otras cosas por no haber sido encontrado culpable de los delitos de los que se le acusaba.

Luego de que el gobierno de México decidió reglamentar los artículos 27 y 130 de la Constitución política del país en materia de relaciones Estado-Iglesia, una ola de descontento y protestas cundió por todo el país. Como consecuencia de ello se crearon la Liga Nacional para la Defensa de la Libertad Religiosa y otras organizaciones de laicos, religiosos y sacerdotes católicos en México.

El padre Pro brindó durante ese periodo sus servicios como consejero espiritual y sacerdote a varias de esas organizaciones. Se hizo rápidamente popular entre los católicos mexicanos y, por ello mismo, fue visto con recelo por las autoridades que resentían su disposición a retar, muchas veces de manera jocosa, las restricciones impuestas por la nueva legislación.

Por ello fue acusado, junto con su hermano Humberto y otros laicos y religiosos mexicanos, como la religiosa Concepción Acevedo de la Llata, "la madre Conchita" (no confundir con Concepción Cabrera de Armida, otra religiosa mexicana frecuentemente identificada como "la madre Conchita"), de participar en una vastísima conspiración para oponerse y derrocar a las autoridades del país.

El ministerio público construyó un caso endeble que ha sido frecuentemente criticado tanto por el tipo de pruebas usadas como por las acusaciones levantadas en contra de los hermanos Pro y otros más. Fue decretada su muerte por fusilamiento, sin juicio alguno solo por orden directa de Plutarco Elias Calles al General Cruz y a pesar de haberse obtenido un amparo a su favor, pero no fue permitida la entrada al actuario para presentarlo y se suspendiera la ejecución.

La debilidad de las acusaciones y el carisma de Pro hicieron que muy pronto su caso se convirtiera no sólo en un ejemplo de los excesos cometidos por el gobierno de México en ese entonces, sino también para que se promoviera su causa de beatificación que, finalmente, fue admitida por la Santa Sede, por lo que ahora se le venera con los títulos de mártir y beato.

Su fiesta, como corresponde con los mártires, es el día del aniversario de su muerte, el 23 de noviembre, y fue instituida por el Papa Juan Pablo II el 25 de septiembre de 1988, en el contexto de las beatificaciones y canonizaciones de laicos, religiosos y sacerdotes víctimas de la represión durante el conflicto Iglesia-Estado de 1926-1929.
 
ya sabemos en que terminan las discusiones de religion y politica, tengan en cuenta que lo que uds expresan en el foro puede ser leido por decenas de personas y es casi seguro que a alguien puedes lastimar en sus creencias con tus comentarios, tambien tomemos en cuenta que a veces somos muy suceptibles.
De favor se les pide mesura y prudencia
 
CRONOPIO TELL:

EL PADRE PRO FUE UN JESUITA CONNOTADO , EN QUE FUNDAS TU DICHO DE LLAMARLO SANTO DE LOS TERRORISTAS?

CONOCES ALGO SOBRE SU VIDA Y OBRA? CLARO QUE NO SEA LA CONTADA POR ELIAS CALLES.

COMO SEGURAMENTE LA RESPUESTA ES NO....... TE DEJO UNA BREVE SEMBLANZA Y QUE CONSTE EN ACTAS QUE NO ES TENDENCIOSA O ESCRITA POR ENTE CATOLICA ALGUNA.

Miguel Agustín Pro Juárez (nacido en Guadalupe (Zacatecas), 13 de enero 1891 - muerto en Ciudad de México, 23 de noviembre de 1927) fue presbítero católico, miembro de la Compañía de Jesús, acusado de participar en actos de sabotaje y terrorismo, en el contexto del conflicto Iglesia-Estado que afectó a México entre 1926 y 1929 (la denominada "Guerra Cristera"). Murió, sin juicio alguno ni desahogo de pruebas, junto con su hermano Humberto Pro Juárez, fusilado por un pelotón en una comandancia de la policía de la ciudad de México, ubicada entonces en lo que es ahora el Edificio El Moro de la Lotería Nacional. Fue beatificado por el Papa Juan Pablo II en 1988, entre otras cosas por no haber sido encontrado culpable de los delitos de los que se le acusaba.

Luego de que el gobierno de México decidió reglamentar los artículos 27 y 130 de la Constitución política del país en materia de relaciones Estado-Iglesia, una ola de descontento y protestas cundió por todo el país. Como consecuencia de ello se crearon la Liga Nacional para la Defensa de la Libertad Religiosa y otras organizaciones de laicos, religiosos y sacerdotes católicos en México.

El padre Pro brindó durante ese periodo sus servicios como consejero espiritual y sacerdote a varias de esas organizaciones. Se hizo rápidamente popular entre los católicos mexicanos y, por ello mismo, fue visto con recelo por las autoridades que resentían su disposición a retar, muchas veces de manera jocosa, las restricciones impuestas por la nueva legislación.

Por ello fue acusado, junto con su hermano Humberto y otros laicos y religiosos mexicanos, como la religiosa Concepción Acevedo de la Llata, "la madre Conchita" (no confundir con Concepción Cabrera de Armida, otra religiosa mexicana frecuentemente identificada como "la madre Conchita"), de participar en una vastísima conspiración para oponerse y derrocar a las autoridades del país.

El ministerio público construyó un caso endeble que ha sido frecuentemente criticado tanto por el tipo de pruebas usadas como por las acusaciones levantadas en contra de los hermanos Pro y otros más. Fue decretada su muerte por fusilamiento, sin juicio alguno solo por orden directa de Plutarco Elias Calles al General Cruz y a pesar de haberse obtenido un amparo a su favor, pero no fue permitida la entrada al actuario para presentarlo y se suspendiera la ejecución.

La debilidad de las acusaciones y el carisma de Pro hicieron que muy pronto su caso se convirtiera no sólo en un ejemplo de los excesos cometidos por el gobierno de México en ese entonces, sino también para que se promoviera su causa de beatificación que, finalmente, fue admitida por la Santa Sede, por lo que ahora se le venera con los títulos de mártir y beato.

Su fiesta, como corresponde con los mártires, es el día del aniversario de su muerte, el 23 de noviembre, y fue instituida por el Papa Juan Pablo II el 25 de septiembre de 1988, en el contexto de las beatificaciones y canonizaciones de laicos, religiosos y sacerdotes víctimas de la represión durante el conflicto Iglesia-Estado de 1926-1929.

Nada más te recomiendo leer la colección de libros "Historia de la Revolución Mexicana" publicada por el Colegio
de México a principios de los años ochenta, no recuerdo precisamente en qué tomo hablan de el Padre Pro, la
madre Conchita. Te concedo que por parte de Obregón y Calles hubo una falta de sensibilidad y respeto hacia
las creencias religiosas del pueblo, pero también es un hecho que los cristeros y algunos religiosos recurrieron
a combatir la violencia con más violencia. En cuanto a la beatificación, no ha sido la primera vez, ni la última que
en el vaticano consagran a un personaje polémico, por decir lo menos, allí está el caso de San Cirilo de Alejandría,
por citar uno.
 
Como en todo movimiento armado se cometen excesos por los participantes, esto es inevitable es parte de la confrontación, y normalmente el bando perdedor es el culpable, (recuerden que la historia la escriben los vencedores).
Fue una cruel guerra que dividió familias, (como la guerra Civil en España, que hasta la fecha sigue viva busquen La Memoria Histórica en Internet)
No defiendo a la iglesia ni acuso al gobierno o viceversa, afortunadamente para este evento no tenemos memoria cayo en el olvido, y eso fue bueno para México, aunque de vez en cuando alguien toca el tema de los mártires y los canonizan, es parte del juego actual son valores entendidos entre iglesia y gobierno, al final los dos son iguales solo buscan el bien estar de sus miembros, el pueblo común y corriente no cuenta.
En mi opinión los verdaderos mártires fueron los miles de civiles y soldados muertos sin saber al cien por ciento porque peleaban, ¡Fanatismo?,¿cumplimiento del deber de defender a la patria?. El caso es que murieron por causa de intereses obscuros de los lideres eclesiásticos y gubernamentales
 
hay varios libros, y algunos se pueden conseguir todavía, algunos de ellos son entre las patas de los caballos de luis del val, por dios y por la patria de heriberto navarrete(mi favorito), hector de un autor extranjero, repicar de campanas, etre otros...

compañero kike: Donde puedo conseguir los primeros dos libros que mencionas?

Agradezco tus comentarios
 
Cierto es que algunos cristeros se desbiaban y cometian atrocidades, pero no por eso hay que juzgarlos a todos, la MAYORIA de ellos luchaban por defender su religion, y sus ideologias, y luchaban sabiendo que se estaban poniendo contra un enemigo mucho mayor que ellos, me parece que antes de juzgarlos deberías de cuestionarte si alguna vez en tu vida tendrías la valentía de defender tu religión como lo hicieron ellos, no te conozco, por eso no puedo decir que no lo harías pero si puedo decir que es digna de exaltar y recordar con orgullo esa valentia...

Con todo el respeto, por favor cite su fuente de investigación para esas conclusiones. La "Cristiada" además de ser una contradicción, es una contra-revolución impulsada por industrialistas, y hacendados cuyas tierras habían sido redistribuidas a los campesinos de los cuales se les había arrebatado. El clero actuó de la misma manera que había hecho durante la conquista del Siglo XVI como porta voz de una conquista económica. En el caso de la Cristiada la Iglesia le dió un aspecto religioso a lo que era la re-conquista de las tierras que los decendientes de los Españoles controlaban. Además, la iglesia tenía sus propios intereses: inconformidad con una constitución que separaba la iglesia de las funciones del estado y la redistribución de las tierras que la iglesia había recibido como compensación de la corona española por haber ayudado en la conquista de los Mexicanos indígenas (véase Emilio Portes Gil, Autobiografía de la Revolución Méxicana, México: Instituto Mexicano de Cultura, 1964).

En vez de exaltar, todos debemos leer y evaluar detalladamente a una iglesia cuyo heroe, Cristo, es un hombre desamparado pero en su comportamiento através de los siglos ha sido la de agente político de la hegemonía. Es agente porque ha justificado al los imperios nuevos que tomaron el lugar del imperio romano que le quitó la vida a ese heroe. Esas son algunas contradicciones que las exaltaciones ocluyen.
 
Hasta hoy 25 de Marzode 2012 y despues de mucho tiempo entendi de que se trataba la GUERRA DE LOS CRISTEROS muchas gracias a todos!
Porque en las escuelas de gobierno jamas te mencionan de esta guerra y menos en las particulares que dan religion.
 
Con todo el respeto, por favor cite su fuente de investigación para esas conclusiones. La "Cristiada" además de ser una contradicción, es una contra-revolución impulsada por industrialistas, y hacendados cuyas tierras habían sido redistribuidas a los campesinos de los cuales se les había arrebatado. El clero actuó de la misma manera que había hecho durante la conquista del Siglo XVI como porta voz de una conquista económica. En el caso de la Cristiada la Iglesia le dió un aspecto religioso a lo que era la re-conquista de las tierras que los decendientes de los Españoles controlaban. Además, la iglesia tenía sus propios intereses: inconformidad con una constitución que separaba la iglesia de las funciones del estado y la redistribución de las tierras que la iglesia había recibido como compensación de la corona española por haber ayudado en la conquista de los Mexicanos indígenas (véase Emilio Portes Gil, Autobiografía de la Revolución Méxicana, México: Instituto Mexicano de Cultura, 1964).

En vez de exaltar, todos debemos leer y evaluar detalladamente a una iglesia cuyo heroe, Cristo, es un hombre desamparado pero en su comportamiento através de los siglos ha sido la de agente político de la hegemonía. Es agente porque ha justificado al los imperios nuevos que tomaron el lugar del imperio romano que le quitó la vida a ese heroe. Esas son algunas contradicciones que las exaltaciones ocluyen.

Este...no.

No habia grandes hacendados impulsando la Cristiada (y menos industriales, la industria en el Bajio inicio hasta despues de los 50's). Y la redistribucion de tierras fue a nivel nacional, y no hubo practicamente resistencia, ya que para esa epoca, ya todos los grandes hacendados habian huido, o habian sido muertos.

No voy a negar el papel de una Iglesia Catolica que no deseaba perder influencia y poder en Mexico. Mas aun, en las etapas finales del conflicto, los altos jerarcas repudiaban el movimiento (en parte, por miedo) y dejaron practicamente solas a las tropas cristeras.

Si usted ha visitado el bajio y los altos de Jalisco, debe haber visto el catolicismo, monolitico y fortisimo, que todavia HOY existe. Hace 90 años era mucho mas fuerte.

Las fotos que tengo de esa epoca no muestan tropas pagadas. Muestran familias enteras cargando estandartes religiosos en el campo de batalla.

Podemos discutir bastante de lo justo, o no, de las restricciones religiosas del gobierno Callista, y de la hipocrecia de las altas autoridades eclesiasticas.

Pero no tenga duda de la sinceridad de la tropa cristera. Creian totalmente estar en una guerra santa, y que morir en ella era garantia del paraiso. Por lo menos, mi bisabuelo murio abatido con esa creencia.

Saludos.
 
Este...no.

No habia grandes hacendados impulsando la Cristiada (y menos industriales, la industria en el Bajio inicio hasta despues de los 50's). Y la redistribucion de tierras fue a nivel nacional, y no hubo practicamente resistencia, ya que para esa epoca, ya todos los grandes hacendados habian huido, o habian sido muertos.

No voy a negar el papel de una Iglesia Catolica que no deseaba perder influencia y poder en Mexico. Mas aun, en las etapas finales del conflicto, los altos jerarcas repudiaban el movimiento (en parte, por miedo) y dejaron practicamente solas a las tropas cristeras.

Si usted ha visitado el bajio y los altos de Jalisco, debe haber visto el catolicismo, monolitico y fortisimo, que todavia HOY existe. Hace 90 años era mucho mas fuerte.

Las fotos que tengo de esa epoca no muestan tropas pagadas. Muestran familias enteras cargando estandartes religiosos en el campo de batalla.

Podemos discutir bastante de lo justo, o no, de las restricciones religiosas del gobierno Callista, y de la hipocrecia de las altas autoridades eclesiasticas.

Pero no tenga duda de la sinceridad de la tropa cristera. Creian totalmente estar en una guerra santa, y que morir en ella era garantia del paraiso. Por lo menos, mi bisabuelo murio abatido con esa creencia.

Saludos.

Exacto, mas que nada creían que estaban en una guerra santa y hacían de todo por defender su religion e igual tengo varios parientes caídos, por esa época. saludos
 
cristiada

Haber que les parece esta pelicula, para mi pinta bien, se estrana el 20 de Abril y no me la voy a a perder.
 
Mi bisabuelo peleo del lado de los Cristeros contra el gobierno de Elias Calles tengo una especie de espada que tiene minimo, mas de 47 años, y si la historia acerca de ella es real, mi bisabuelo luchò con ella en Santa Ana del Conde, entonces tendria mas de 83 años hoy la he restaurado, pero le regue porque oslo tome pocas fotos con el movil de antes de la restauracion total. Saludos.
 
Mi bisabuelo peleo del lado de los Cristeros contra el gobierno de Elias Calles tengo una especie de espada que tiene minimo, mas de 47 años, y si la historia acerca de ella es real, mi bisabuelo luchò con ella en Santa Ana del Conde, entonces tendria mas de 83 años hoy la he restaurado, pero le regue porque oslo tome pocas fotos con el movil de antes de la restauracion total. Saludos.
Nooo! No la hubiera restaurado, compadre. En su estado original es como son valiosas.

Aunque sea suba unas fotos...
 
barca.jpg

En el asalto perecieron todos los miembros de la escolta y varios pasajeros fueron acuchillados por los asaltantes, mismos que luego incendiaron el tren causando otras muertes. Los carros fueron incendiados con los heridos todavía abordo. Este brutal acto, fue, en palabras del historiador Francis Patrick Doole:

“Una horrible carnicería, pues cundió el pánico entre los pasajeros que, gritando, trataron de escapar solo para morir en medio de las balas”.

Las tres cuartas partes del pasaje, como lo señala el general Cristóbal Rodríguez, “eran en su mayoría gentes humildes y seguramente católicas, y tuvieron allí la muerte más atroz”. En la fiera batalla, que duró tres horas, los 57 soldados de la escolta del tren repelieron el ataque en los vagones de segunda clase y se parapetaron en las ruedas de los carros, en el Express y en la locomotora. Los cristeros, por su parte, asesinaron a decenas de pasajeros indefensos (incluidos mujeres y niños).

El periódico Excelsior, en la edición del 21 de abril de 1927, así resaltó la nota:

“Se quemaron todos los carros y pasando a cuchillo a la mayor parte de los pasajeros de segunda, muchos de los cuales fueron quemados vivos dentro de los mismos carros del tren. Este salvaje atentado supera en barbarie a cuantos se conocen en la historia de México”.

El diario antes citado, en su editorial del 23 de abril, así concluía:

“Un suceso desgarrador y sangriento, como pocos solían ocurrir, se ha sumado a la serie de los que cada día lamentamos. Este caso, por su ferocidad, emula a cuantos habíamos visto en tiempos anteriores en los que no se mencionaba a Cristo. Un saldo de ciento treinta vidas humanas, muchas de ellas niños inocentes no puede menos que causar justa indignación y horror aquí y en el Vaticano. Jalisco se ha visto asolado por una lucha de carácter religioso que ha degenerado en actos que deben horrorizar a las personas de corazón bien puesto, cualquiera que sea su credo. Los atentados salvajes, las venganzas innobles, los delitos contra la propiedad y la vida, deben ser reprimidos con mano dura, sea quien fuere el que los cometa; y no debe haber persona sensata que los apruebe, porque desprestigian a cualquier causa”.

De acuerdo al historiador Moisés González Navarro, algunos actores sociales “atribuyeron al arzobispo Orozco y Jiménez la ‘autoría intelectual’ de ese asalto y al futuro arzobispo de México Darío Miranda haber participado ‘con el grado de general cristero’”
 
Otros datos:

Militarismo católico
Los niños cristeros
Edgar González Ruiz

“Tuve muchos problemas de niño por ver tantos crímenes. Ya quería tener un cuchillo para matar a alguien. Los religiosos destruyeron mi infancia”, esto afirma a sus casi 80 años de edad, el señor Jesús Martin del Campo, oriundo de Tepatitlán, una de las principales zonas de influencia cristera, en los Altos de Jalisco y quien afirma ser nieto de Sóstenes Flores, parienta del hoy beato Anacleto González Flores.
Nacido en 1927, en plena guerra cristera, señala que sus recuerdos de la infancia estuvieron relacionados con la violencia y el odio religioso. Su abuela tenía fresca la memoria del día en que los cristeros conducían a 8 soldados prisioneros a quienes habían rebanado las plantas de los pies”.
“Los curas sabían esto y no hacían nada para evitarlo, porque estaban de acuerdo”, señala Martín del Campo, quien añade que se sabía también de curas sanguinarios que ejecutaban con cuchillos a los prisioneros luego de haberlos hecho confesar sus pecados, así como de otros que participaron en descarrilamientos de trenes y otras acciones bélicas, mientras que en las mismas filas curas disolutos, pederastas, alcohólicos y abusadores aprovechaban la credulidad del pueblo para alimentar sus propios vicios.
Ya en tiempos recientes, Tepatitlán fue escenario de los abusos sexuales del sacerdote estadounidense Charles Theodore Murr Letourneau, contra niños huérfanos en una Casa Hogar que fundó en 1987. Sobra decir que el pederasta fue protegido por sus superiores.
En la lucha cristera, el odio fanático hacia los supuestos enemigos de Dios, es decir, del clero, fue atizado por los propios religiosos, tanto en las misas como en las familias, en las parroquias y en las escuelas confesionales, donde a los niños “los fanatizaban tremendamente”.
“Tropas de Jesús, vamos a la guerra” proclamaban los niños en uno de los himnos cristeros que cantaban en los templos y en escuelas católicas que funcionaban clandestinamente difundiendo una ardiente propaganda contraria al progreso y a los ideales liberales.
Recuerda el pariente del beato Anacleto, quien fuera uno de los organizadores de la guerra y de las sociedades secretas derechistas, que se habían establecido en ese pueblo cristero un par de curas franceses que promovían entre los niños la agrupación de los “Tarsicios”, inculcándoles la supuesta obligación de morir en defensa de la fe, como los cristeros.
Derivada de la Adoración Nocturna, que fue creada en 1848, los Tarsicios se inspiraban en el Santo del mismo nombre, un niño mártir que en el siglo III en Roma, murió defendiendo la hostia.
Siguiendo ese tipo de ejemplos, niños y adolescentes participaron en la lucha cristera, e incluso uno de ellos, José Sánchez del Río, ha sido beatificado por haber tomado las armas contra el gobierno. En 1928, cuando tenía 14 años de edad fue capturado en combate y ejecutado. Se le atribuye la frase “Me han cogido porque se me acabó el parque, pero no me he rendido” (leemos en Joaquín Blanco Gil Clamor de la sangre, Jus, México, 1967).
Documentos elaborados por miembros del Pentatlón Deportivo Militar en Jalisco, donde esa organización fue auspiciada por los Tecos, listan a los “muchísimos niños cristeros”, al lado de los niños héroes de Chapultepec y del niño artillero “entre las bellas figuras arquetípicas de heroísmo y de verdadero sentido patriótico y espíritu militar registrado entre jóvenes y niños”. Creado en 1938, es decir en vísperas de la II Guerra, el Pentatlón no reconoce en sus principios ninguna preferencia religiosa, pero hay zonas como Jalisco y Guanajuato, donde se le ha señalado como semillero de grupos ultraderechistas.
Para los cristeros, preparar a los niños para la guerra suponía enseñarles el manejo de las armas, de tal modo que había religiosos que los enseñaban a armar y desarmar un fusil, así como el odio hacia los liberales y la falta de escrúpulos para matarlos
Según Martín del Campo, “entre los cristeros había niños de 11 años que combatían porque ya podían cargar y disparar un arma. En Atotonilco, uno de ellos, de 15 años mató a su hermano, de 14, porque estaba contra la Iglesia”.
Prosigue: “Uno veía matar a la gente constantemente, en un ambiente donde a veces los asesinos eran bien vistos y se hacían famosos”. Ese clima de violencia y militarismo lo llevó a alistarse luego en el ejército federal, en la época de la guerra mundial.
El fanatismo católico se mantuvo luego de la guerra cristera, si bien se expresó de forma menos abierta, en casos como el del “padre Pérez, que fue mi padrino”, quien “daba pláticas para que se conservaran los grupos cristeros”.
En la época cristera, al lado de las “viejas mojigatas” que se pasaban la vida en los templos, y en rezos y ejercicios espirituales, que se mortificaban con cilicios a la vez que pregonaban la destrucción de los incrédulos, había también las Vírgenes de los Cristeros, jóvenes agraciadas que seducían a los militares para llevar a cabo sus labores de espionaje y terrorismo, y la prueba de la doble moral del fanatismo religioso, la tuvo el entrevistado en el hecho de que su iniciación sexual, a los doce años, fue nada menos que con la monja que daba clases de moral en la escuela donde estudiaba en Tepatitlán.
 
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