mauricio ceceña
Miembro de la Vieja Guardia
Ellos tabién comen %&/&&(//())
hace una semana le encontré la huella a este venado, al menos eso creo, en una pradera que le decimos por estos lados viento malo, ya se imaginaran el porqué, la cual tiene solo 2 palos, santos que en esta época florecen y es de bastante agrado para el venado, el caso es, que me propuse abrirle campaña, la primera tarde que fui a ispearlo iva acomodándome en el tarango de la camioneta, y que me llega el venado un poco menos de 40 mts de distancia, el rifle
( cal. 243 sako ) lo tenía por un lado y sin tiros, pero eso si comiéndome unos cacahuates, al final de cuentas solo me dedique a verlo y disfrutar de la emoción, volví en dos ocasiones mas y nada, pero ayer tenía el presentimiento que sería mi día de suerte así que volví con energías renovadas, a las 6 de la tarde ya oscuro, veo a penas a este animalito detrás del zacatal, sale a un claro, lo veo completito parado se estiraba para arriba como queriendo oler mi ratro, no le doy más tiempo y suelto el tiro y detrás de el, escuche el impacto, casi más fuerte que el propio tiro, al enfocarlo como era ya tarde y estando yo solo me oriente según yo por un arbusto seco que estaba detrás de el, me fui a buscarlo cuando llego a la orilla del monte que es donde el venia saliendo, me confundo y todas las ramas y arbustos se me hicieron iguales, el caso en que me dieron las 12:30 de la madrugada y del venado nada, ni siquiera sus huellas, hoy por la mañana me fui a buscarlo, en un principio lo busque pensando que el tiro lo había hecho aproximadamente a unos 150 mts. Que es donde toda la noche lo anduve buscando y no fue así, el lugar donde estaba parado era más a la derecha y el tiro fue aproximadamente entre 250 y 300 mts. Y el venado lo encontré cerca de 30 mts de ahí, con el resultado ahí arriba plasmado en las imagenes, ...............a mendigos coyotes que también comen................. Que chin/&(/&)/(/) me pararon., y ahora compañeros estoy dispuesto habrirles campaña ya no tanto a los venados sino a los coyotes que no nos dejan saborear el producto de la caza.
hace una semana le encontré la huella a este venado, al menos eso creo, en una pradera que le decimos por estos lados viento malo, ya se imaginaran el porqué, la cual tiene solo 2 palos, santos que en esta época florecen y es de bastante agrado para el venado, el caso es, que me propuse abrirle campaña, la primera tarde que fui a ispearlo iva acomodándome en el tarango de la camioneta, y que me llega el venado un poco menos de 40 mts de distancia, el rifle
( cal. 243 sako ) lo tenía por un lado y sin tiros, pero eso si comiéndome unos cacahuates, al final de cuentas solo me dedique a verlo y disfrutar de la emoción, volví en dos ocasiones mas y nada, pero ayer tenía el presentimiento que sería mi día de suerte así que volví con energías renovadas, a las 6 de la tarde ya oscuro, veo a penas a este animalito detrás del zacatal, sale a un claro, lo veo completito parado se estiraba para arriba como queriendo oler mi ratro, no le doy más tiempo y suelto el tiro y detrás de el, escuche el impacto, casi más fuerte que el propio tiro, al enfocarlo como era ya tarde y estando yo solo me oriente según yo por un arbusto seco que estaba detrás de el, me fui a buscarlo cuando llego a la orilla del monte que es donde el venia saliendo, me confundo y todas las ramas y arbustos se me hicieron iguales, el caso en que me dieron las 12:30 de la madrugada y del venado nada, ni siquiera sus huellas, hoy por la mañana me fui a buscarlo, en un principio lo busque pensando que el tiro lo había hecho aproximadamente a unos 150 mts. Que es donde toda la noche lo anduve buscando y no fue así, el lugar donde estaba parado era más a la derecha y el tiro fue aproximadamente entre 250 y 300 mts. Y el venado lo encontré cerca de 30 mts de ahí, con el resultado ahí arriba plasmado en las imagenes, ...............a mendigos coyotes que también comen................. Que chin/&(/&)/(/) me pararon., y ahora compañeros estoy dispuesto habrirles campaña ya no tanto a los venados sino a los coyotes que no nos dejan saborear el producto de la caza.