Hace más de 20 años, en un asalto en una tienda de materiales de construcción, yo estaba cerca de la caja y un malándrín sacó de un portafolio blando una de esas armas y me apuntó durante todo el evento.
Después llegó la policía, con las armas en la mano y de nuevo, apuntando a todo el mundo.
Una vez más, vemos que las leyes las obedecemos las personas decentes.
Es ilegal fabricar esas porquerías, es ilegal portarlas, es ilegal la munición..
Y?
A los malandros les vale..
Por eso sería cómico si no fuera trágico escuchar las sandeces que dicen los ignorantes sobre modificar las leyes relativas a las armas de fuego..
Si ya hay leyes, pero no las obedecen por la impunidad existente..
Si las modificaran para permitirnos mayores calibres a los civiles, pues bien..
Lo demás es demagogia