El que porfía mata venado
Miembro de la Vieja Guardia
https://www.google.com.mx/url?sa=t&...humano&usg=AFQjCNEZ593EVpmecZ4CvDjzKMZE-g5I3Q
Interesantisimo.
Saludos
Interesantisimo.
Saludos
Siendo honestos... ¿a quién diablos le importa? Si dos hombres o dos mujeres deciden unir sus vidas en matrimonio... debería ser su derecho, no me parece que se devalué la institución del matrimonio, ni creo que promueva la homosexualidad, hay gente, un buen número de gente, que nació con una preferencia u otra... o la desarrollo, es indistinto, al final se trata de dar seguridad al núcleo social, la pareja... idealmente, se ampliaría el derecho a la adopción, que tampoco promueve la homosexualidad, más bien promueve la familia.
Aclaro, mi absoluto respeto por las dos visiones sobre el tema, sin embargo, los únicos, verdaderamente, aterrados de legitimar el matrimonio de personas del mismo sexo son personas con agendas religiosas-dogmáticas... no tanto por la condición anti-natural de la unión sino por el hecho de perder terreno en términos del mismo dogma... y adherirse a éstas agendas sin reflexión al respecto es, igualmente, absurdo.
No veo que necesariamente se nos quieran imponer costumbres a las que no somos proclives.je je je Lo mismo pensaban en Sodoma y Gomorra y vea como les fue (sarcasmo sobre su punto de vista sobre agendas religiosas-dogmáticas )
Aquí no se trata ni de satanizar una u otra tendencia, simplemente que no es correcto tratar de imponer un criterio, por sobre otro criterio, y acusar de absurda a la gente que no quiera compartirlo, reflexionar, creo que lo he reflexionado, mis puntos de vista son claros y también debatibles, pero no con argumentos de que son absurdos, estoy de acuerdo en que por seguridad social se permita la unión civica entre personas del mismo sexo, simplemente por el hecho de que tengan derecho de heredar o recibir asistencia medica o pension de viudez, etc. en lo que no estoy de acuerdo es que se nos quiera imponer costumbres a las que no somos proclives y que solo benefician a un sector reducido de la sociedad, olvidándose de otros más vulnerables.