en la costa grande de guerrero hay una comunidad que se llama la cañada; en ese río los he pescado tanto con arpón como con tarraya. ésta última es una experiencia muy bonita; se las comento:
A eso de las 11 de la mañana, debes recolectar coco, hacer unos cuadritos con ellos y dejarlos a la luz del sol para que estos se sequen un poco y suelten aceite, una vez que los 20, 30 o los pedazos de coco que gustes estén secos los amarras a un listón y los pones en una de dos bolsas que llevas contigo, ( bolsas de mandado ) una de cada lado. A eso de las cinco de la tarde te adentras al río y caminas lo más que gustes y conforme avanzas, recoges una piedra, le amarras el coco con el listón y la sumerges, dejando así una carnada, posteriormente pones una piedra encima de otra grande para que tengas referencia de que allí abajo hay una carnada. Así sucesivamente vas dejando una por una, una por una ( cuestión que entre los madrazos con las piedras, el peso de las bolsas, el faro que llevas en la cabeza, de esos de minero, la tarraya, los cigarros, la cerveza y demás!!!! Es una verdadera chinga!!!! Jajajaja) en fin, ya que depositaste todas tus carnadas y estás hasta casa de la chiflada de donde te adentraste al río, esperas a que anochezca y rezas para que no salga la luna, puesto que si hay luna de luz fuerte ya te amolaste puesto que no salen los langostinos. Ya que se hace de noche, regresas buscando tus referencias de las piedras que dejaste para que con la luz de tu farito en la cabeza, de manera indirecta únicamente para que no deslumbres y espantes al langostino; alcanzas a notar los oijtos del mismo o su cuerpo y avientas la tarraya, lo recoges, te dices a ti mismo que eres un fregón jejeje y lo pones en la bolsa del mandado ( en la otra, recuerda que llevas dos ) y desatas el coco de la piedra y lo pones en la otra bolsa, puesto que si lo dejas, los langostinos se empachan y se mueren. Así recorres todo el río sacando los langostinos y tus carnadas. Llegando al final de tu recorrido, te das cuenta que te picaron 1,000,000 un millón de moscos, que las piernas las traes hechas pedazos pero lleno de satisfacción. Al otro día el guiso vale la pena.
Es una experiencia muy bonita, se las recomiendo. Saludos a todos.